Después de siete “largos y tediosos” años en la facultad de Ingeniería, Manuel Ávila decidió abandonar los estudios universitarios para convertirse en pupilo de uno de los lutiers más reconocidos de Guatemala, Ramón Iglesias.

Un lutier es aquella persona que se dedica a la fabricación y reparación de los instrumentos de cuerdas (guitarra, violín, chello, ukelele, entre otros) y Ávila decidió dedicarse al oficio de ser artesano de la música en manos del maestro Iglesias, quien lleva más de 40 años trabajando en esta profesión

Para ser lutier es necesario dominar la carpintería, pero también los conocimientos en ingeniería, física y botánica. Esto último sirve para conocer la materia prima de una guitarra: los árboles y reconocer los sonidos que produce cada tipo de madera.

¿Cómo Manuel decidió cambiar el rumbo de su vida?

Manuel es conocido por su nombre artístico Chele Longuis, en reconocimiento a cómo su mamá -de origen salvadoreño- lo llamaba cuando era bebé: “chelito”, por canchito.

Desde los 7 años, Chele disfrutaba desarmar cosas e inventar juguetes. Pero un grave accidente a los 9 años marcó su infancia al incendiarse su pierna derecha con 28 cachinflines.

Después de numerosas operaciones, opiáceos y diversos especialistas en quemaduras de alto riesgo, se recuperó y continuó con sus estudios escolares. A sus 18 años ingresó a la carrera de Ingeniería Electrónica y ahí estuvo durante siete años, los cuales definió como “tediosos y aburridos”, razón por la que abandonó la universidad.

Antes de que sucediera eso, a los 19 años se asoció con su tío Pancho para administrar cuartos de ensayo, una academia musical y un estudio. El proyecto se llamó El Cuarto y marchó de maravilla durante tres años.

Después se dedicó a investigar acústica arquitectónica y eso lo llevó a conocer al famoso lutier español pero radicado en Guatemala, Ramón Iglesias, quien le propone enseñarle todas las disciplinas de la precisión y la investigación, tanto para construir guitarras y bajos, como para desarrollar laboratorios de electrónica.

Entrevista Lutier Ramon Iglesias

“Me apasionaba el trabajo, los primeros años no descansaba ni domingos, luego de un par de años Ramón me pidió que mejor ya no llegara los domingos”, recuerda.

Durante cinco años  y trabajando 12 horas diarias, Chele se especializó en los maravillosos instrumentos de cuerda y decidió realizar una tesis personal titulada Investigación de efectos de sonido en electrónica y análogos para guitarras y bajos, desarrollando más de 30 efectos de sonido distintos.

Con la experiencia invaluable que obtuvo con Ramón, decidió crear su marca personal de instrumentos de cuerda y lo decidió llamar UNIQ.

Hasta la fecha, Chele ha fabricado 17 instrumentos entre guitarras y bajos, su marca se caracteriza por fabricar piezas únicas y nunca repetir diseños

Ahora ha emprendido un un nuevo proyecto que se llama Resonando. Éste es un proyecto de investigación cinematográfìca que pretende documentar la fabricación de instrumentos musicales exóticos. Para esto tiene planificado viajar a India en búsqueda de los secretos de la fabricación de instrumentos como la satira.

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Chele, sin duda, es un personaje inusual y por eso fue invitado a participar en nuestro segmento #SeresIntrépidos, para que a través de la cuenta de Instagram de Radio Infinita, conozcamos el paso a paso de la fabricación de ese instrumento que tanto a armonizado nuestras canciones favoritas.

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¡Que lo distinto te encuentre!