La capital guatemalteca cuenta con 95 kilómetros cuadrados de áreas naturales, esto representa el 42 por ciento del territorio total.

En la ciudad contamos con seis parques ecológicos abiertos al público y cuatro en fase de diseño, además de otros 300 parques públicos.

En los parques ecológicos se localizan diversas clases de pino y encino, mientras que en la red urbana existen más de 36 especies de árboles, de los cuales predominan la magnolia, el matilisguate y la jacaranda*.

Todo esto ha tenido su reconocimiento por la Unión de Ciudades Capitales Iberoamericana, que en asamblea celebrada en abril de 2018, decidieron nombrar a Guatemala como la Capital Verde Iberoamericana del 2019.

Estas fueron las razones por las que reconocieron a la capital de Guatemala:

  • Recuperación de áreas verdes – Parques comunitarios, parques urbanos, plazas emblemáticas
  • Implementación de corredores verdes (parques lineales)
  • Construcción de parques ecológicos
  • Reforestación
  • Campañas de Educación Ambiental – reciclaje plásticos, papel, lata, aceite.
  • Transporte público municipal
  • Normativa – Plan de Ordenamiento Territorial (áreas G0 y G1)
  • Metros cuadrados de área verde por habitante
  • Acciones que promueven convergencia social en espacios públicos (pasos y pedales, domingos verdes entre otros)

En el primer programa del año de La Hora de Crecer, el arquitecto Manfredo Corado de la Universidad Landívar nos presentó el proyecto que busca diseñar mejor la ciudad y prevenir crisis durante alguna catástrofe.

Manfredo experto en urbanismo táctico, también ha sido el encargado de guiar el proyecto de Resiliencia en respuesta al desastre del Volcán de Fuego, donde estudiantes de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Rafael Landívar ganaron el 2 lugar en el concurso de Lisboa sobre Resiliencia.

Manfredo menciona que Guatemala debe comenzar aprender de las lecciones, y accionar sobre estas preguntas, ¿Cómo tomar esos riesgos ambientales (somos el país no. 9 en riesgo por el calentamiento global) para prevenir? ¿Cómo nuestra construcciones tienen que responder a las necesidades de un país sísmico?

“Resiliencia urbana, es una palabra transversal. La palabra resiliencia se aplica a diferentes situaciones humanas, es el poder de flexibilizarse ante los golpes de la vida, y el urbanismo táctico nos prepara antes los desastres.”

Conoce más del proyecto:


Escucha el programa completo de La Hora de Crecer aquí

¡Que lo distinto te encuentre!

*Datos proporcionados por la Municipalidad de Guatemala