La Asociación de Paracaidismo Deportivo de Guatemala (ASOPARAC) se ha preparado en las últimas semanas para lograr romper un récord centroamericano. Se trata de realizar el Bigway más grande nunca antes hecho en los cielos de la región, donde participarán 24 paracaidistas profesionales (hombres y mujeres).
Un Bigway es una formación de un grupo grande de paracaidistas y su objetivo es formar una figura previamente definida durante la caída libre a más de 200 km/h. Durante el salto y la caída libre, cada paracaidista debe posicionarse en el lugar exacto de la formación para que ésta sea validada y tomada como un nuevo récord.
El tiempo para poder formar un Bigway puede ser desde 55 segundos a una altura de 12 mil pies (3.6 km), hasta 75 segundos a una altura de 18 mil pies (5.4 km).
El récord nacional que actualmente tiene la ASOPARAC es de 19 paracaidistas, realizado en 2016.
De lograrse el récord de 24 paracaidistas, además de ser la formación más grande en Guatemala y Centroamérica, será la primera vez que se salte de dos aviones simultáneamente. Los aviones que se utilizarán serán un Twin Otter con capacidad para 19 paracaidistas y un Cessna Caravan con capacidad para 12.
Ésta es la figura que se pretende hacer para el nuevo récord. Los paracaidistas tienen 60 segundos para formarla y el récord no se logrará si uno de ellos no llega a la formación o no está en la posición definida.
Desde hace varias semanas, las personas que van a participar en este evento de gran magnitud, se prepararon con saltos programados haciendo formaciones más pequeñas (entre 8 y 16 paracaidistas) para ir definiendo posiciones de cada uno, según experiencia y habilidad.
Este sábado 22 de septiembre, cada uno de los participantes deberá saber exactamente su posición y tomar todas las medidas de seguridad previamente establecidas para que el salto sea no sólo satisfactorio, sino muy seguro.
La etapa más riesgosa del salto es al momento de abrir el paracaídas, ya que al ser tantos volando al mismo tiempo y en el mismo lugar es muy importante lograr escapar. A esto se refiere a que una vez finalizada la formación, en los últimos 10 segundos de la caída libre, cada paracaidista se deberá alejar lo suficiente para que al abrir su paracaídas, no tenga a otro cerca.
Otro momento a tener muy en cuenta es el del aterrizaje ya que todos los paracaidistas deben realizar el mismo patrón. Esto significa que previo a los saltos, se definen las altitudes de apertura, el camino y/o patrón a seguir para perder altura y finalmente la dirección de aterrizaje y así evitar chocar y/o enredarse.
Datos curiosos:
La temperatura cambia drásticamente al ascender a más de 12,000 pies. Puede que en el lugar de aterrizaje la temperatura esté a 28 grados centígrados y al salir del avión esté a 4 o 6 grados centígrados.
La velocidad de caída libre puede alcanzar hasta 250 km/h durante el “diving”, que es la posición vertical que adapta el cuerpo para volar más rápido y acercarse a la formación. Esto lo experimenta especialmente los paracaidistas que salen por último del avión.
Si quieres ver en primera fila este momento histórico, puedes llegar este 22 de septiembre a las 8 am a Gravity Skydive en el kilómetro 93 de la Autopista a Puerto Quetzal.
¡Que lo distinto te encuentre!